No tiene que hacer nada, solo negarse a frimar más contratos y considerar que el último firmado le da un margen de permanencia en esa vivienda de tres años.
Si el casero le intenta "presionar" para que firme, anúnciele una denuncia por acoso inmobiliario.
Pienso que le convendría leer
EL DECALOGO DEL INQUILINO Pedro Hernández Olmo, abogado