Amparo tienes razón, Amplío la respuesta.
No he leido ese contrato, me pongo en el peor de los supuestos. El contrato no menciona para nada la piscina y el inquilino reconoce en el mismo que, despues de examinar todo, enncuentra la vivienda, sus enseres, muebles e instalaciones de su conformidad.
En tal caso el casero puede negarse a arreglar la piscina, alegando que si el inquilino quiere bañarse la arregle él; de todos modos al inquilino le interesa obtener ese dictamen, no vaya a ser que el casero, al término del alquiler, se "olvide" de que la piscina no funcionaba.
Aprovecho para recomendar a la consultante que lea
EL DECALOGO DEL INQUILINO