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Hola:
El inquilino manifestó que tenía dificultades por lo que acordamos verbalmente la rebaja de la renta en 200 € a cuenta de la fianza. Pasado mas de 1 año el monto sube mas que la fianza (y yo lo acepto) pero el inquilino se desdice y pretende mantener el nuevo precio como definitivo y recuperar su fianza. Para colmo quedarse con los muebles que el mismo estrenó y yo pagué porque no aparece relación en el contrato.
¿La ley ampara esas actuaciones?
¿Puedo si no acepta, reclamarle el pago de la diferencia con la cantidad que aparece en el contrato?
Muchas gracias
Pues deduces mal.
Por ejemplo, si el inquilino estuviera pagando el ibi, que es una cuestión que se puede pactar en el contrato y si no se pacta lo tiene que pagar el propietario, y el inquilino se enterase de que no se lo podían haber estado cobrando, se sobreentendería un acuerdo verbal, con lo que estaría obligado a pagarlo, aún sin estar reflejado en el contrato.
La justicia no beneficia ni a una parte ni a la otra, sencillamente lo que intenta es evitar que hayan abusos o basarse en palabras donde uno dirá una cosa y el otro otra diferente, y sin pruebas no puede saber quién dice la verdad.
En su caso no es que le perjudique, es que ha hecho las cosas mal. Solo debía haber hecho un anexo al contrato especificando la rebaja y el tiempo, y que hubiera sido firmada por las dos partes. La culpa es suya, no de la justicia, pero siempre es más fácil excusarse en que la culpa es de otros o del sistema.
Ya, entiendo que a la ley le valen mas pruebas fehacientes que buena fe (tanto por mi parte al rebajar a cuenta como por la del inquilino al acceder al pago con la fianza). No obstante deduzco que se prima la posición de una de las partes (el inquilino).
Gracias por su respuesta.
La ley no ampara actuaciones injustas, pero exige que quien las invoque pueda acreditarlas.
En cuanto al primer supuesto cometió un grave error ya que el inquilino puede acreditar indiciariamente que hay un acuerdo para rebajar el alquiler, esa rebaja efectiva adimitida por vd pacificamente.
En cuanto a los muebles cometió otro error, no inventariarlos, ahora puede intentar rectificar mediante el envío de un burofax en el que le relacione esos muebles y le 'recuerde' que tiene factura de su compra y que verificará su estado cuando se termine el arriendo.
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